¿Sabe qué alimentos son beneficiosos para la salud bucodental?
¿Y cúales son perjudiciales?
La mayoría de las personas somos conscientes de que el azúcar es el enemigo número de uno de los dientes, pero hay otros alimentos, que muy pocos relacionan con los problemas bucodentales, debido a que, algunos de ellos, son considerados alimentos saludables.
Por un lado, podemos hablar de las exposiciones frecuentes a alimentos ácidos. Muchos alimentos que se consumen habitualmente, y que además se consideran sanos, son muy ácidos. Sin embargo, según Cristina Serrano Sánchez-Rey, miembro del grupo de trabajo entre la Sociedad Española de Periodoncia y la Sociedad Española de Diabetes, «aunque pueden ser saludables para el organismo en general, no lo son necesariamente para el esmalte y la dentina».
Por ejemplo, los cítricos, tienen altos contenidos en vitamina C, por lo que son alimentos fundamentales tanto para la salud general como, a nivel oral, para la prevención de las enfermedades de las encías. Sin embargo, afirma, presentan un problema: el pH ácido puede provocar la erosión del esmalte dentario. «El pH crítico en el que se disuelve el esmalte está en torno a 5 o 5,5, pero la mayoría de los zumos de frutas tienen un pH por debajo de este punto. El pH del zumo de naranja natural oscila entre 2,92 y 5,27 (las naranjas de Valencia tienen un pH de 3,35, mientras que las mandarinas presentan un pH de 2,92)», indica.
En muchas dietas se recomienda tomar todos los días en ayunas un vaso de agua templada con limón. Esto puede mejorar el metabolismo, pero el cepillado dentario inmediato a la ingesta de ácidos ocultos en la dieta puede provocar un mayor desgaste del esmalte y de la dentina (erosión de esmalte y dentina y exposición de los túbulos dentinarios), lo que puede incrementar la sensibilidad de los dientes, comenta. Así, algunos especialistas en hipersensibilidad dentinaria recomiendan separar el cepillado de los momentos de exposición al ácido, tanto si se realiza antes o después de dicha exposición.
Ojo a los refrescos y bebidas energéticas
Otros tipos de ácido que pasan desapercibidos para el público en general son los refrescos gaseosos y bebidas energéticas. Independientemente de los azúcares refinados que presenten, prácticamente todas estas bebidas, poseen un pH muy ácido (entre 1,5-3), lo que provoca erosión de esmalte y dentina y la aparición de hipersensibilidad dentinaria. Esto ocurre, afirma, con las bebidas light o bajas en azúcares, en las que el pH sigue siendo igualmente ácido. Por ello, no por pedir bebidas light debemos estar tranquilos. Es importante reducir el consumo de dichas bebidas, sobre todo en niños.
Té verde
El té verde, señala la experta, es una bebida altamente consumida desde hace siglos debido a sus propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y anticarcinogénicas, asociadas a su alto contenido en polifenoles, en este caso, las catequinas, pero como todo, es importante consumirlo en su justa medida. En los últimos años, ha aumentado enormemente el número de estudios científicos que relacionan el té verde con la salud periodontal, pero los investigadores recomiendan un máximo de 2-3 tazas al día. «Aparte de aumento de la tensión arterial, ansiedad, o menor absorción de hierro y Vitamina B1, los efectos negativos que podemos ver en la boca como consecuencia de una excesiva ingesta de té verde son sobre todo las tinciones dentarias, asociadas a los taninos, así como la sequedad bucal, que puede contrarrestarse con la ingestión suficiente de agua».
Otros alimentos muy consumidos actualmente por sus propiedades antioxidantes, que también pueden provocar tinciones dentarias son las granadas, cerezas, arándanos y moras (incluidos sus zumos).
Cada vez son más los estudios que relacionan el consumo de alcohol con el cáncer oral y la periodontitis. Sin embargo, el vino tinto, presenta un tipo de polifenoles (el resveratrol), que son positivos para la salud periodontal y general, eso sí, debe ser consumido en pequeñas cantidades, que no pasen de un pequeño vaso diario. Sin embargo, el vino tinto, en grandes cantidades, también puede provocar, tinciones dentarias, asociadas a los taninos, sequedad bucal, así como hipersensibilidad dentinaria, asociada a su pH ácido (pH que oscila entre 3-4, menos ácido, sin embargo, que el pH del vino blanco, que es aproximadamente de 2,4).
Inflamación
Por último y no menos importante, las dietas ricas en azúcares refinados, carbohidratos y grasas saturadas, generan inflamación. Recientemente se ha introducido el término de «comidas que inducen inflamación» que está relacionado con alimentos que elevan los niveles sanguíneos de glucosa y lípidos debido a un aumento del stress oxidativo. Este tipo de dieta proinflamatoria es un factor de riesgo en el desarrollo de diabetes, enfermedades cardiovasculares, obesidad, y enfermedad periodontal». En este sentido, añade, los dentistas deberían incluir en su tratamiento «recomendaciones a todos los pacientes animándoles a que aumenten su ingesta de aceites de pescado, fibra, frutas y vegetales, y reduzcan los niveles de azúcares refinados y grasas saturadas, como parte de las medidas preventivas/terapéuticas de la enfermedad periodontal y como mensaje beneficioso para el resto de la salud general».
Fuente: ABC