fbpx

El Coco ¿Adelgaza o no adelgaza?

El Coco ¿Adelgaza o no adelgaza?

Si existe un fruto versátil ese es, sin duda, el coco. Un alimento que por su peculiar sabor y textura, generalmente, consigue: o que te encante o… que no te guste nada. El uso del coco transciende mucho más allá de lo culinario y sus beneficios abarcan desde lo saludable hasta lo puramente estético.

Se ha hablado mucho de los beneficios que aporta el coco aunque, por otro lado, también es un alimento muy cuestionado por su concentración en grasas saturadas. Pero, ¿ayuda realmente a adelgazar?, ¿aumenta el colesterol? ¿qué es verdad y qué es mito?

Propiedades del coco natural y sus derivados

Efectivamente, el coco es un fruto que presenta un alto contenido graso y calórico. El coco está compuesto principalmente por ácidos grasos saturados, concretamente unos 30g por cada 100 de producto, y su aporte energético ronda las 350 Kcal/ 100g.

Entre los beneficios que presenta el coco y sus derivados, debido fundamentalmente a su contenido en ácidos grasos como el ácido láurico, podemos destacar su poder antimicrobial y antibacteriano, que lo hacen aliado perfecto a la hora de combatir bacterias celulares y procesos infecciosos.

Otro de los beneficios que presenta es a nivel digestivo.El coco está compuesto por ácidos grasos de cadena media muy fácilmente digeribles, lo que representa una gran ventaja para aquellas personas que sufren problemas intestinales y digestivos.

Pero lo que muchos quieren saber… ¿el coco adelgaza o no adelgaza?

Evidentemente el coco, como cualquier alimento que comamos, no adelgaza: nada adelgaza por si solo. Pero lo que sí es cierto, es que el coco es un alimento que se ha relacionado con la pérdida de peso ya que gracias a los TAGs medio de longitud de cadena que posee, el cuerpo es capaz de quemar calorías de forma más rápida que con otras fuentes de grasa, generando una mayor activación metabólica. Por este motivo las investigaciones han concluido que el coco puede ser un buen agente para prevenir la obesidad y estimular la pérdida de peso.

Lo que no debemos olvidar es que es el balance energético global de la dieta quien determinará fiablemente la pérdida o ganancia de peso y, por supuesto, su consumo siempre debe de ser dentro de un marco moderado ya que el aporte calórico del coco es realmente alto.

Aceite de coco

El aceite de coco es una variedad vegetal de aceite que ha creado, y sigue creando, muchísima controversia. Cerca del 90% de este aceite está compuesto por ácidos saturados, motivo por el cual ha sido desaconsejado en diferentes guías dietéticas de organizaciones como el Departamento de Salud y Servicios Sociales de EEUU o por la mismísima Organización Mundial de la Salud, viéndose relacionado con un aumento del colesterol y del riesgo de enfermedad cardiovascular.

A pesar de estas conclusiones, lo cierto que es que recientes investigaciones han desvinculado este posible efecto del aceite de coco, concluyendo incluso que el aceite de coco virgen extra, obtenido a partir de granos y a través de medios en los que no se sufre alteración ni hidrogenización del aceite, el consumo de esta modalidad podría verse relacionado con un descenso del colesterol y lípidos en sangre.

Unos beneficios de los que también podrían beneficiarse aquellas personas que sufran de diabetes debido a la consecuente regulación de glucosa en sangre asociada.

A la hora de su consumo no debemos olvidar de que se trata de una fuente alta de grasa y, como tal, deberemos limitar las cantidades que tomemos.

Dentro de las utilizaciones que se le confieren al aceite de coco, además de su consumo gastronómico, destaca su propiedad dermatológica y de belleza. De hecho diferentes estudios han demostrado que el aceite de coco posee propiedades hidratantes para la piel capaces de combatir diferentes afecciones como la piel seca o el acné, motivo por el cual se ha convertido en ingrediente más que habitual de jabones y cremas específicas.

Agua de coco

Es el líquido que se encuentra de modo natural en el interior hueco del coco y, a modo de curiosidad, el líquido extraído del fruto verde era utilizado en la antigüedad y durante la Segunda Guerra Mundial para dar transfusiones de plasma urgentes.

Retomando la actualidad, el agua de coco destaca nutricionalmente por su contenido en potasio y antioxidantes, conteniendo además citoquininas que promueven la división celular y destacables ingredientes biológicamente activos como L-arginina y el magnesio.

Todos estos beneficios nutricionales han convertido al agua de coco en una verdadera bebida isotónica natural que hoy en día ya se comercializa y embotella para su venta directa.

El consumo de agua de coco es, sin lugar a dudas, todo beneficios nutricionales

Leche de coco

Se obtiene de la mezcla de agua con la propia carne madura y triturada del coco. Su contenido en azúcar y aceite le confiere un olor y aspecto muy similar al de la leche tradicional. Hoy en día se comercializa de forma habitual en supermercados, y en el sector de la alimentación se utiliza básicamente para la preparación de platos y salsas, así como de batidos.

Aunque su aspecto sea similar al de la leche tradicional, no se trata de un sustituto o alternativa a ésta.

Aunque su consumo debe de ser moderado, la leche de coco destaca por una gran riqueza nutricional en cuanto a vitaminas y minerales, como magnesio, fósforo y calcio, fundamentales para el organismo, y por su contenido en hidratos de carbono fuente de energía, que ronda los 5g por cada 100 de producto. Además, su contenido en azúcar es bastante bajo.

Además de los beneficios propios que le aporta el coco, y de los que hemos ido hablando a lo largo del post, la leche de coco de forma esporádica puede ser una alternativa culinaria para aquellas personas que tengan alergia a la leche o intolerancia a la lactosa.

Fuente: Vitonica

Login

13 − 11 =

Contraseña perdida?
WhatsApp chat